La lejía tiene una multitud de usos. Se clasifica como pesticida y fungicida debido a su capacidad para matar células bacterianas. El blanqueador también puede blanquear blancos, decolorar productos coloreados e incluso neutralizar el ántrax. Estos efectos son causados por el ácido en el blanqueador, que se come todo a su paso. La acidez del blanqueador también le da la capacidad de matar las plagas domésticas, incluidas las arañas. Sin embargo, no es un insecticida registrado debido a sus efectos secundarios dañinos tanto en humanos como en las superficies sobre las que se rocía, por lo que se recomienda precaución al usarlo para matar arañas.
Paso 1
Mezcle una parte de cloro con tres partes de agua en una botella con atomizador.
Paso 2
Rocíe la mezcla directamente sobre las arañas en un rango de 6 a 10 pulgadas. Use lo que sea necesario para matar a la araña. La cantidad exacta depende del tamaño de la araña.
Paso 3
Barrer la araña muerta y tirarla. Limpie el blanqueador de la superficie para evitar cualquier efecto blanqueador.
Paso 4
Rocíe la mezcla de lejía en las áreas donde se sabe que las arañas anidan, se esconden o entran a la casa todas las semanas hasta la temporada de invierno para servir como repelente.